Imagen virtual de Mjøstårnet, un rascacielos de 18 pisos construido en madera en la localidad noruega de Brumunddal.
Mjøstårnet, con 18 plantas, pretende convertirse en un símbolo de la construcción ‘verde’
Texto: María Rosa
A 150 kilómetros de Oslo, la ciudad de Brumunddal acogerá, en muy poco tiempo, el edificio de madera más alto del mundo, una muestra más de la apuesta en la cultura noruega por el aprovechamiento de los recursos y su utilización de forma innovadora.
Mjøstårnet, que es como se llama el edificio, tendrá una altura de 80 metros y en sus 18 plantas integrará apartamentos, oficinas, un hotel y diversos espacios comunes. Su apertura está prevista para marzo de 2019.
Arthur Buchardt es el creador de este proyecto con el que pretende crear un símbolo verde de la construcción, utilizando recursos y proveedores locales y un material sostenible y renovable. Este innovador proyecto ya ha sido reconocido con galardones como Norwegian Tech Award 2018 y The New York Design Awards 2018.
La construcción de edificios con elementos como la madera puede suponer una reducción de emisión de gases de efecto invernadero de hasta un 85% en la producción de los materiales.
