Brushboo ofrece una empuñadura de bambú y una presentación respetuosa con el medio ambiente
Es una apuesta más por la disminución del consumo de plástico y por mitigar los efectos de sus residuos sobre el medioambiente. Aunque podría parecer pequeña, la realidad, según la firma, es que cada año se tiran 4.500 millones de cepillos de dientes, la mayoría, si no todos, de plástico y con envoltorios de plástico. Por eso nace Brushboo.
Cada cepillo de dientes Brushboo está fabricado con una empuñadura de bambú moso y un packaging respetuoso con el medio ambiente. Las cerdas, por su parte, están libres de BPA –Bisphenol, un componente químico de no muy buena fama utilizado para fabricar plásticos– y están hechas con Nylon 4 Dupont, el plástico con mayor biodegradabilidad con el que se pueden fabricar las cerdas del cepillo.
Disponible po 5,90 euros y 4,90 para niños, el pack premium, a 9,90 euros, está compuesto por un cepillo, una bolsa de algodón para transportarlo y 10 semillas de bambú para plantar en casa; todo ello viene en una caja redonda de papel kraft.
El cada cepillo, diseñado en colaboración con dentistas para crear la mejor forma y tamaño que resulte ergonómico, hay grabada además una sugerente frase para empezar el día con buen ánimo: Make happiness a habit, Why so serious?, Smile, I’m watching, Life is too short, live passionately, Your future is outside, waiting… (es.brushboo.com)